golpe mortal, giros excitados
garras en el solario
murmullos de cristales y dorado.
Duendes en sitios no esperados
como enlaces conyugales,
uno tras el otro, amarrados.
Príncipes negros,
soberanos en rosado
alas de querubines
aleteando en plazas y tejados.
Fetiches de emociones
intérpretes del solfeo,
aprisionando tentaciones.
Nocturno de los dioses
a venus contagiando
con eléctricas sensaciones.
Quince centímetros de placer
agujas de acero muy delgado
alegrías que ofrecen
los brillantes y afelpados.
El erotismo en el tacón
cuellos de ganso espigados
vértigo en bermellón
sorprendente e insospechado
cilíndrico, loco y agresivo
en su armazón de cuero bien lustrado.
Miriam
ResponderEliminarMe encanta leer estos "calientes" escritos tuyos, realmente disfruto con ellos. Me paseé por tu bloq, me gustó y volveré a hacerlo. un abrazo.
Miriam
ResponderEliminarMe encanta leer estos "calientes" escritos tuyos, realmente disfruto con ellos. Me paseé por tu bloq, me gustó y volveré a hacerlo. un abrazo.
Miriam
ResponderEliminarMuy bueno, sorprendentemente erótico.
Nos vemos.
Quince centimetos de placer (la media).
ResponderEliminarEl erotimo de tacon. (cada uno tiene sus estímulos)
En concreto (sensualidad)
Un saludo.
Plas, plas, plas........... (Aplausos)
ResponderEliminarYa no me sorprendes, a la, a la........
Me he gustado mucho, felicidades.
Antonio
Miriam
ResponderEliminarYo tengo un poema que se titula "Fuga", que habla sobre un oropel de cuero lustrado. Ah, que por cierto expela veneno cuando se lo acosa. Tengo la leve sospecha que tu poema habla sobre lo mismo.
Sumamente sensorial. Tremendas imagenes, tremendas, Miriam.
Saludos
Patricia